Santo Domingo.- En lo que va de año, unos diez miembros de la Policía y Fuerzas Armadas Dominicanas han perdido la vida a manos de antisociales que tienen como objetivo principal despojarlos de sus armas de reglamento.
Esta situación se produce en medio de una batalla campal que llevan los cuerpos del orden contra la delincuencia, en la que al menos 30 delincuentes han sido abatidos en los primeros meses del 2024 en los llamados intercambios de disparos. Margaret Ramírez hace un recuento de estos casos que han impactado a la sociedad.
Los llamados a defender a la ciudadanía también se convierten en víctimas mortales de los antisociales.
No respetan rangos ni tiempo en servicio y utilizan cualquier artimaña para despojar a los policías y militares de sus armas de reglamento; el caso más reciente fue el raso policial Omar Pérez Everson de 21 años.
En los últimos meses del 2024, los registros señalan que unos diez miembros de los cuerpos del orden han caído víctima de los asaltos y atracos en diversos puntos del país.
Mientras, en su lucha contra la delincuencia, al menos 30 presuntos antisociales han sido abatidos por la Policía Nacional en los primeros meses de 2024, en medio de los llamados intercambio de disparos.
Los occisos oriundos de diversas provincias, eran perseguidos con acusaciones como robo, asesinato, secuestro, homicidio, tráfico de drogas, asaltos, sicariato, porte de arma ilegal, entre otras infracciones a las leyes dominicanas.
El hecho más reciente ocurrió ayer en San Cristóbal, cuando en horas de la tarde cayó abatido el presunto delincuente Erickson Cabrera Luciano, a quien se le acusa de dar muerte a varias personas, incluyendo un sargento del Ejército, Desiderio Pantaleón Ureña.
En el transcurso del primer trimestre de 2024 (enero-marzo), se reportaron al menos 21 fallecimientos como resultado de disparos ejecutados por miembros de la Policía Nacional.
Uno de los casos más sonoros fue la muerte el pasado 08 de marzo de José Antonio Figueroa, alias “Kiko La Quema”, uno de los más buscados por la Policía Nacional, y a quien se le acusaba de liderar una peligrosa banda en la comunidad Cambita Garabitos, provincia San Cristóbal.
Comparando estas cifras del primer trimestre con las del año 2023, durante el mismo lapso de tiempo, los agentes de la Policía Nacional abatieron a cuatro personas más en supuestos intercambios de disparos que el año anterior, cuando se registró un total de 17 muertes.