Rachel Jelley, residente de un tranquilo suburbio australiano, vivió un aterrador momento cuando abrió la puerta de su garaje y una enorme pitón alfombra de 4 metros cayó desde el techo. Aunque este tipo de encuentros no son extraños para ella y su familia, esta vez la sorpresa fue mayúscula.
La familia Jelley, acostumbrada a la fauna salvaje que habita la zona, ha convivido durante años con una variedad de animales que frecuentan su propiedad. Sin embargo, Rachel expresó que, a pesar de su experiencia, este reptil de gran tamaño la tomó completamente por sorpresa.
«Estamos acostumbrados a ellos, pero oh sí, realmente me asustó», comentó la mujer, aún con el corazón acelerado tras el incidente.
La pitón alfombra, conocida por su gran tamaño y coloración espectacular, no es una especie rara en la región, pero ver un ejemplar de tal magnitud en su propio garaje dejó a la familia Jelley un tanto inquieta.
Según los expertos, las pitones son animales relativamente inofensivos para los humanos, pero su presencia en áreas residenciales sigue siendo un recordatorio de la proximidad de la vida salvaje australiana.
A pesar del susto, Rachel mencionó que este reptil lleva un tiempo viviendo en el garaje de su hogar, lo que demuestra la integración entre la vida doméstica y la fauna local en esta zona de Australia.