
Lima, Perú (AFP).- El presidente peruano, Francisco Sagasti, dijo que es una opción extrema la imposición de una cuarentena pese a la inminente llegada de una segunda ola de la pandemia que ya se insinúa con el incremento de contagios.
Sin embargo, aseguró al diario nacional El Comercio que las autoridades analizan “cómo es que tomamos decisiones sobre esto».
«Lo que estamos preparando y vamos a ofrecerle a la ciudadanía va a ser totalmente transparente», manifestó Sagasti sobre las nuevas medidas que se tomarán por el incremento de los casos que llegaron a más de 2,000 esta semana.
El mandatario no descartó totalmente un confinamiento general de la población, ya que en gran medida dependerá no solo del gobierno sino de la gente.
«Si volvemos a una situación terrible como la que tuvimos en mayo o junio del año pasado, que teníamos una pendiente y llegamos al nivel más alto de infectados, pero yo confío en que eso no va a suceder», sostuvo el jefe de Estado.
En el país andino hubo cuarentena del 16 de marzo al 30 de junio por el alto número de contagios y fallecidos.
Perú anunció esta semana la compra de 52 millones de vacunas contra el covid-19 a la farmacéutica china Sinopharm (38 millones) y la británica AstraZeneca (14 millones).
Un primer lote de un millón de vacunas de Sinopharm debe llegar antes de fines de enero y se aplicará a personal médico.
El gobierno reportó el viernes un primer caso con la variante británica del coronavirus en una mujer peruana, residente en Lima.
Perú vive un repunte de casos y decesos confirmados de covid-19, desde mediados de diciembre.
Las autoridades sanitarias señalan que los incrementos son indicios de una segunda ola en un país que registra poco más de un millón de contagios y 38,200 muertos desde el inicio de la pandemia en marzo.
En ese sentido, el gobierno prorrogó en noviembre por 90 días, hasta inicios de marzo de 2021, el estado de emergencia sanitario.