A la comunidad evangélica le preocupan los niveles de violencia que registra el país con muertes y atracos de manera indiscriminada, lo que, para el presidente del Consejo Dominicano de Unidad Evangélica, es producto de la descomposición social y la falta de políticas públicas que fomenten los valores familiares y una cultura de paz.
El presidente del CODUE, Feliciano Lancen, llamó a los líderes evangélicos, políticos y comunitarios a aunar esfuerzos para fomentar una cultura de paz en todos los ciudadanos.
En ese sentido, indicó que la inflación, los problemas económicos y la falta de oportunidades traen violencia y sostuvo que las iglesias deben prepararse para que sus comunidades puedan replicar lo que es una convivencia pacífica.
“cuando tú ves a una clase con una elite que con el dinero del pueblo se enriquece sin ninguna sanción, también eso preocupa y trae violencia” expresó.
Lancen se refirió al tema previo a encabezar este sábado una cumbre de capacitación ministerial auspiciada por el CODUE, con el objetivo de concienciar y sensibilizar a los congresistas cristianos a cerca de los desafíos que enfrenta la iglesia y desarrollar jornadas de oración permanentes.