Aferrada al ataúd de su hijo, la señora Luisa Encarnación imploró justicia por la muerte de José Luis Pineda Pérez, de 38 años, quien según denuncian familiares y testigos, fue abatido por agentes policiales durante un operativo en el barrio Canta la Rana, en la demarcación de Los Tres Brazos.
“El dolor me consume. Ellos lo mataron porque quisieron. Mi hijo no estaba haciendo nada malo”, expresó entre lágrimas la madre del fallecido, quien pidió que el caso no quede impune, como dijo ha ocurrido con otros.
El hecho ocurrió el pasado martes a plena luz del día, cuando dos patrullas motorizadas de la Policía Nacional realizaban un operativo. De acuerdo con testigos, los agentes confundieron al joven con otra persona y le dispararon sin previo aviso mientras caminaba de espaldas.
Un trabajador del barrio
Vecinos describen a Pineda Pérez como un hombre trabajador, dedicado al lavado de vehículos en la zona. “Yo lo conocía, lavaba carros entre la calle A y la calle B. No era un delincuente. Lo que hicieron fue un crimen”, relató un residente del sector.
Otro testigo narró que, tras los disparos, observó a los agentes “empujando el cuerpo con los pies, como queriendo esconderlo entre la hierba, nerviosos y desorientados”.
Investigación en curso
La comunidad se ha unido al clamor de justicia y exige una respuesta clara de las autoridades. Mientras tanto, el vocero de la Policía Nacional informó la tarde del miércoles que el caso está bajo investigación para determinar las circunstancias que llevaron al uso de la fuerza letal.
José Luis Pineda Pérez deja una hija de nueve años en la orfandad. La familia espera que las autoridades actúen con transparencia y que se sancione a los responsables.
