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miércoles 4, diciembre, 2024

Polémica en baloncesto universitario EE.UU. por trato desigual a jugadoras

Los Angeles, Estados Unidos | AFP | Los organizadores del popular y lucrativo ‘March Madness’, el torneo final del basquetbol universitario de Estados Unidos, recibieron grandes críticas el viernes después de conocerse las diferencias entre las instalaciones de entrenamiento de los equipos masculinos y femeninos.

Sedona Price, jugadora de la Universidad de Oregón, abrió el debate al publicar en Twitter imágenes de la «sala de pesas» que se les proporcionó en una de las sedes del torneo, en San Antonio (Texas), con apenas un pequeño soporte con pesas ligeras sin bancos ni máquinas de ejercicio.

«Déjenme que les enseñe la sala de pesas de los hombres», dijo Prince mientras su vídeo mostraba un extenso gimnasio perfectamente equipado en la sede del torneo masculino en Indiana.

La jugadora mostró también un amplio espacio vacío disponible en San Antonio para desacreditar la respuesta inicial de la NCAA (National Collegiate Athletic Association), organizadora del torneo, que alegó que la diferencia de equipamiento se debía a la falta de espacio.

«Si no estás molesto por este problema, entonces eres parte de él», subrayó Prince, cuya publicación cosechó reacciones indignadas en todo el mundo del basquetbol, incluida la de la estrella NBA Stephen Curry (Golden State Warriors).

Kyrie Irving, figura de los Brooklyn Nets, también denunció las disparidades en un mensaje en Instagram. 

«Entonces, NCAA. ¿Esto es lo que le estáis haciendo a nuestras Reinas?!!!» dijo el base All-Star. «¡No podemos tolerar esto! Se merecen más!».

«No es nada nuevo»

El vicepresidente de la NCAA para el basquetbol, Dan Gavitt, se disculpó el viernes en una videoconferencia con medios de comunicación, informó ESPN. 

«Hemos organizado intencionadamente el basquetbol bajo una misma organización, con el objetivo de la coherencia y la colaboración. Cuando no cumplimos con estas expectativas, es culpa mía», dijo Gavitt. 

«Pido disculpas a las estudiantes y deportistas de basquetbol femenino, a los entrenadores y al comité de basquetbol femenino por haber pasado por alto la cuestión de la sala de pesas en San Antonio. Lo arreglaremos lo antes posible», aseguró el dirigente.

Sin embargo Dawn Staley, la ex jugadora y actual entrenadora del equipo femenino de la Universidad de Carolina del Sur, dijo que las diferencias en las instalaciones de entrenamiento son solo la punta del iceberg. 

Esta mentalidad «no se limita a nuestro campeonato (…) Está en nuestros campus. Así que esto no es nada nuevo», dijo la tres veces medallista de oro olímpica.

Staley llamó la atención sobre otras disparidades de género en el torneo, como las diferencias en los obsequios que reciben los participantes e incluso en las pruebas de covid-19 que se administran. 

Geno Auriemma, entrenador del potente equipo femenino de la Universidad de Connecticut, dijo esta semana que sus jugadoras están siendo sometidas diariamente a pruebas rápidas de antígenos, menos precisas que las PCR que se administran al combinado masculino.

El ‘March Madness’ (Locura de Marzo), un torneo de playoffs que decide al campeón universitario del año, es uno de los eventos más populares del calendario deportivo estadounidense.

Se estima que unas 100 millones de personas siguieron en años anteriores esta competición, cuyos derechos televisivos son vendidos por más de 800 millones de dólares.

© Agence France-Presse

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