Si los políticos de la oposición de nuestro mercado electoral dijeran la verdad, si no intentaran engañar al pueblo, sus palabras cobrarían valor ante el electorado, aumentando las probabilidades de ganar posiciones en elecciones congresuales, municipales y nacionales, pero lo que hacen es mentir, chocando de frente con estadísticas históricas; por ejemplo, con el tema de la deuda pública a lo que me refiero a continuación.
Primero, los hechos, la historia apoyada por estadísticas, enseña que, no obstante el contexto global caracterizado por volatilidad económica y política, el gobierno de Luis Abinader y el PRM redujeron el peso de la deuda sobre la economía en más de 10 puntos porcentuales, desde el máximo de la pandemia, diciembre de 2020, hasta agosto de 2025.
Como porcentaje del PIB nominal, en menos de cinco años se desplomó de 56.9% a 46.3%, impulsada por un crecimiento de la economía a velocidad de crucero, el PIB nominal, que suma el producto real y la inflación, creció mucho más que la deuda, lo que permitió reducirla por debajo de la media de la región de 73.7%.
Segundo, en términos absolutos la deuda total ascendía a US$60,182.9 millones a final de agosto 2025, lo que se traduce en US$15,560.6 millones más que en 2020, aumento del endeudamiento destinado al pago de las siguientes facturas: a) Vacuna importada con urgencia desde China y Estados Unidos; b) Vacunación gratuita del pueblo dominicano con motivo de la crisis sanitaria Covid-2019; c) Salarios de trabajadores públicos y privados; y d) Programas sociales durante los duros meses de cierre de actividades económicas del país, y, mucho tiempo después, evitando no sólo que aumentara la pobreza monetaria del país como sucedió en casi todos los países de la región durante la pandemia, como reportan informes de organismos internacionales, reducirla, como al efecto, en 6.9 puntos porcentuales, de 25,8% en 2020 a 18.9% de la población total en diciembre 2024.
Tercero, el pago de las facturas no debió hacerse con préstamos sino con ahorro del presupuesto público, pero no sucedió de esa manera, las cajas fiscales estaban completamente vacías cuando Danilo Medina y PLD entregaron el poder a Luis Abinader y PRM el 16 de agosto de 2020, en medio de la peor crisis sanitaria que ha vivido el país en más de cien años, por lo que en justicia, el aumento del endeudamiento por US$15,560.6 millones, corresponde al gobierno de Danilo Medina y PLD.
Cuarto, inequívoco es el dato estadístico del aumento de la deuda por US$15,560.6 millones, sin citar la cifra, hacia referencia a dicha cifra, principalmente, el presidente Luis Abinader cuando aseguró que por lo menos 80% de los préstamos contraídos por su gobierno se destinaba al pago de deudas dejadas por los gobiernos de Leonel, Medina y PLD 2005-2020.
El presidente Luis Abinader, como filosofía para el presupuesto público anual, aplica la regla de oro que desaconseja endeudarse para cualquier destino que no sea la inversión, una de las razones por la que la deuda absoluta acumulada por el país ascendente a US$60,182.9 millones hasta agosto 2025, no es tema para organismos internacionales, tampoco para inversores, consideran que la cifra global es poco importante comparado con la media de la región, más ha sido el extraordinario ritmo de crecimiento del PIB real. Toman en cuenta, además, que como por ciento (46.3%) del PIB, la deuda está muy por debajo de la media (73.7%) de la región, y nos financiamos más barato por la fuerte rebaja de la deuda sobre el producto.