El partido entre Brasil y Argentina, en el cual la ‘Albiceleste’ sacó a relucir su rótulo de campeones del mundo y se reafirman como líderes de las Eliminatorias Sudamericanas Mundial 2026, estuvo marcado por la agresión entres hinchas de ambas selecciones.
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La pelea campal que se inicio en las gradas ocasiono el retraso del partido por casi treinta minutos. Inclusive, Lionel Messi incitó a sus compañeros a irse a los vestuarios ante el alto riesgo. Tras unos minutos, los de Lionel Scaloni volvieron al campo del Maracaná para terminar con un histórico Maracanazo (1-0).
Así se dio la pela
Poco después de cantarse los himnos de ambos países, se desató una pelea en las gradas del estadio Maracaná, lo que provocó los disturbios y donde policías golpearon a aficionados argentinos, según se pudo observar por medio de TyC Sports.
Lionel Messi, capitán de Argentina, retiró a sus jugadores al vestuario ante la falta de seguridad. Posteriormente el equipo albiceleste retornó al campo de juego para comenzar el partido entre los dos gigantes del Cono Sur.
Durante la transmisión se observó que ningún jugador de Brasil o de su cuerpo técnico se acercaron a las gradas junto a sus colegas argentinos para tranquilizar el momento de tensión, por lo que la violencia por parte de la policía se mantuvo.
Por algún momento se especuló que Argentina no quería regresar al terreno de juego a disputar el duelo eliminatorio ante Brasil, pues su seguridad estaba en riesgo y no le gustó observar cómo golpeaban a sus hinchas.
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Tuvieron que pasar 27 minutos para que pudieran arrancar el partido pese a que la cara de los jugadores argentinos no era la mejor, pues se notaban molestos por lo ocurrido y sobre todo por no sentir el apoyo de sus colegas brasileños al momento de intentar tranquilizar la pelea.
No es la primera ocasión de un conato así
No es la primera ocasión en la que pasa este tipo de problemas en la Conmebol y tampoco en un juego entre Argentina y Brasil, pues hay que recordar que por una situación similar no se llevó a cabo el encuentro de eliminatorias en el último Mundial de futbol.
Hace unas semanas también se vivió algo similar en la final de la Copa Libertadores cuando el Fluminense y Boca Juniors se vieron las caras, pues la policía agredió a los aficionados de los Xeneizes.
Un día antes de que se llevara el juego en el Maracaná, en las playas varias personas de seguridad golpearon a los hincas argentinos, mientras ellos se encontraban armando una fiesta sin molestar a nadie.
