El gobierno hondureño dijo este lunes que las acusaciones en contra del presidente Juan Orlando Hernández son falsas, con relación a los fiscales federales de los Estados Unidos que lo señalaron como protector de un narcotraficante a cambio de grandes sobornos.
En dos tuits que publica la Casa Presidencial de Honduras se precisó que las acusaciones son “100 % falsas y parecen estar basadas en mentiras de criminales confesos que buscan venganza”.
Además, agregó que esos alegatos languidecen ante el “contundente” hecho de que durante la gestión de Hernández el tráfico de cocaína por Honduras pasó de un 87 % en 2013 a un 4 % en 2019, según publicaciones del Departamento de Estado.
También precisaron que el gobierno de Juan Orlando Hernández “fue reconocida como un socio de confianza y efectividad por los países aliados en la lucha anti narcotráfico”.
En un documento presentado ante un tribunal de Nueva York, los fiscales detallaron la supuesta relación de Hernández con Geovanny Fuentes Ramírez, presunto narcotraficante hondureño detenido en Miami en marzo pasado.
La Fiscalía se enmarca en el caso contra Fuentes Ramírez y en él no se nombra explícitamente al presidente hondureño, al que se identifica como cómplice o coconspirador número 4 (CC-4), pero su identidad es fácilmente reconocible por las referencias a su cargo y a su hermano Juan Antonio «Tony» Hernández, que fue declarado culpable de narcotráfico en Estados Unidos.
