
Internacional.- Cada año se celebra el 17 de noviembre el Día Mundial del Niño Prematuro, para concienciar sobre el parto prematuro.
La fecha se celebra desde el año 2009, abordando el alto riesgo de mortalidad que tiene el traer bebes prematuros al mundo, así como para prevenir y ayudar a los niños y a sus familias para que puedan superar con éxito esta circunstancia.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS) más de la mitad de las muertes de niños menores de cinco años se dan durante el periodo neonatal.
Desde la Organización de las Naciones Unidas han adoptado sobre la base de la evidencia científica aportada por la OMS, una estrategia “claramente definida” para reducir drásticamente las muertes de recién nacidos.
Esta consiste en fortalecer mediante inversiones la atención durante el parto y el primer día y la primera semana de vida; mejorar la calidad de la atención materna y neonatal; así como llegar a todas las mujeres y todos los recién nacidos, en particular los más pobres.
La estrategia prevé asimismo que todos estos esfuerzos deberán contar con el apoyo de sólidos sistemas de salud capaces de prestar unos servicios de calidad a todas las personas “cuando quiera y donde quiera se precisen”.