SANTO DOMINGO, RD. – Una integrante de la familia de Leyda Vicente Sánchez, quien fue asesinada por su expareja junto a sus padres y su cuñado, informó que han recibido amenazas por parte del victimario, quien aun se encuentra prófugo de las autoridades.
«El llamó a una de mis tías y le dijo lo que había hecho y que iba por más», expresó la pariente de los fallecidos, durante una entrevista telefónica en el programa El Día.
Las investigaciones respecto al caso han dado a relucir que Rubén Darío Jiménez, el asesino de las cuatro víctimas, tiene un perfil altamente peligroso, hecho que tiene con gran preocupación a los familiares.
«Leyda conoció a ese hombre y todos en la familia percibieron que algo no iba bien, él se llenó de odio con ellos porque lo aconsejaban. La vieron cambiar, la vieron triste», indicó.
Dijo que cuando Leyda se querelló en su contra, Rubén Darío había sido arrestado por la Policía Nacional y que luego fue enviado a la Unidad de Violencia de Género, donde fue liberado.
Sobre el caso, la Policía Nacional hizo un llamado este martes a Rubén Darío Jiménez para que se entregue a las autoridades por la vía que considere pertinente, a fin de que responda por el cuádruple asesinato que se registró en el sector Brisas del Edén, en el municipio Santo Domingo Este.
El vocero de la Policía, coronel Miguel Balbuena Álvarez, dijo que agentes mantienen una búsqueda activa hasta dar con el paradero del hombre.
Hace alrededor de 20 días que la Fiscalía de la provincia Santo Domingo había dictado una orden de alejamiento contra Rubén Darío Jiménez Pérez por sus constantes agresiones contra Leyda Esterlin Vicente Sánchez, de 25 años, con quien procreó dos hijos.
Alrededor de las 3:00 de la tarde del lunes, Jiménez Pérez irrumpió en una casa donde estaba reunida la familia y le emprendió a tiros contra los presentes, muriendo en el acto Leyda, su madre Mercedes Orfelina Sánchez Suazo, de 50 años y Henry Antonio Feliz Gómez, de 47 años.
Además, resultaron heridos la hermana de Leyda, Orlin Maciaer Vicente Sánchez, de 26 años, y el padre de ambas, Ángel Robert Vicente Montaño, de 52 años, quien no sobrevivió a las heridas de bala y murió la mañana del martes.
